Violencia de género
Violencia de género
Centro Kemena:
Servicio Foral de acogida de media estancia para mujeres y sus hijas e hijos. Permite a la mujer, a sus hijos e hijas y a las personas adultas dependientes a su cargo, que pertenezcan a la misma unidad convivencial, disponer de un espacio físico del que carece, así como de un conjunto de profesionales, y de recursos materiales y metodológicos que le van ayudar de manera especializada, preservando los grados de intimidad necesarios y acordes al momento de la familia.
Se caracteriza por ofrecer una atención socioeducativa, una atención formativa a través del taller de costura, una atención jurídica, una atención psicopedagógica y una atención residencial (consistente en alojamiento y alimentación). A su vez, se ofrece a la mujer un espacio que le permita reflexionar con tiempo y en un clima de seguridad sobre su situación y encontrar la salida más adecuada. La estancia en el centro se produce en convivencia comunitaria, lo cual conlleva un compromiso de respeto a los derechos y deberes propios y ajenos. También se llevan a cabo programas e interacciones tendentes a reforzar el ámbito laboral, el de integración comunitaria y el de relaciones sociales que ayuden a la mujer a recuperar la autoestima y la seguridad en sí misma.
Nº de plazas del Centro Kemena: 26
Txikiak:
Servicio Foral de Intervención Familiar para menores víctimas de la violencia de género.
Este servicio está diseñado para atender a las niñas, niños y adolescentes que han vivido en contextos de violencia de género, entendiendo por tal cualquier acto de violencia ejercido por su padre (o pareja de la madre) hacia su madre. Cuando hablamos de violencia no nos ceñimos únicamente a la violencia física, ya que también puede existir violencia psicológica, económica y/o sexual.
La exposición de las personas menores a esta forma de violencia en sus familias les convierte también en víctimas directas de la misma. Está suficientemente probado que niños y niñas que viven o han vivido en sus hogares una situación de violencia de género presentan una afectación en las diferentes áreas de su desarrollo y les puede causar serios problemas de salud.
Desde el presente servicio se ofrece una atención especializada y la reparación del daño causado. Se interviene sobre el impacto psicológico y sobre las secuelas que la exposición a la violencia haya ocasionado en las y los menores así como en el vínculo materno filial, potenciando los factores de protección.
Cada persona menor y su familia va a contar con un equipo compuesto por una figura psicoterapéutica y una socioeducativa o únicamente una figura psicoterapéutica, con posibilidad de realizar por tanto un abordaje con una doble atención: psicoterapéutica o psicoterapéutica y socioeducativa.
Tiene una capacidad de atención a 40 menores.
Talleres de prevención de la violencia de género
Cada día de nuestras vidas estamos las personas estamos expuestas a manifestaciones de violencia, ya sea porque la vemos, la recibimos o la ejercemos. Normalmente cuando hablamos de violencia tenemos como referente a las diversas expresiones de violencia física o verbal, sin embargo, pocas veces advertimos la forma sutil en que se presenta la violencia.
Considerando que la violencia de género tiene su base en pautas culturales de gran arraigo y trayectoria, las medidas preventivas que desde todos los foros internacionales se recomiendan, son aquellas dirigidas al afrontamiento del problema desde su misma raíz: modificación de las estructuras cognitivas que lo sustentan. La prevención de la violencia de género debe ser un principio, una perspectiva, una estrategia, un objetivo y una política y ha de significar la necesidad de cambio en las formas y condiciones de vida de las mujeres, como el fin preventivo más eficaz.
El desarrollo de programas educativos, de prevención del maltrato, en distintos países ha ampliado el conocimiento que tenemos sobre violencia de género y está permitiendo que los centros docentes sean espacios idóneos para trabajar en la Prevención de la violencia en relaciones de género.
Los espacios de educación formal, en tanto que coprotagonistas -junto con la familia y los medios de comunicación- de los procesos de socialización primaria, desempeñan un papel fundamental en la construcción del sistema de sexo-género potenciando en niñas y niños diferentes roles, valores y capacidades en función del sexo.
Es fundamental que, desde el ámbito de la educación, se siga desarrollando una labor preventiva de la futura desigualdad entre hombres y mujeres, facilitando a niños y niñas unos procesos educacionales que apliquen los principios de la coeducación y en los que la igualdad sea un valor central.
Desde el año 2004 Berriztu ha impartido talleres de prevención de violencia de género en diversos colegios, institutos y universidades. Para conocer objetivos, contenidos y metodología de la oferta formativa en Prevención de Violencia de Género.